sábado, 23 de marzo de 2013

Sólo su felicidad

Mientras me termino de arreglar pienso en lo que nos pasó hace 5 años...
Estaba en su casa esperando a que se terminara de afeitar. Quizás me había arreglado demasiado, pero la ocasión lo merece. ¡Aún no me podía creer que les fuera a confesar que estamos juntos!
Ya nos habíamos quedado a dormir juntos más de una vez, en mi casa, mis padres estaban encantados con él, sabían que era el hombre de mi vida, que me respetaba y no podía estar con nadie mejor. 
Nos presentamos ante sus padres, les cuenta lo nuestro, y al parecer no se lo tomaron muy bien ya que se tuvo que venir a vivir a mi casa.
Una lágrima recorre mi mejilla al recordar todo lo que sus padres le dijeron ese día. No me aceptaron. ¿Sería mi imagen? ¿La primera impresión? No lo creo. En ese momento alguien llama a mi puerta mientras me abrocho los zapatos.
-¿Se puede?- En ese momento mi mente se quedó en blanco.
-Claro, pase.-Mi suegro estaba en la puerta de mi habitación.
-Comprendo que quieras estar con mi hijo, es un chico formidable.
-Lo sé.
-Quiero pedirte disculpas por el trato que os di hace 5 años, a ambos. Os vais a casar y quiero estar presente en la boda de mi niño. Espero que puedas perdonarme ya que solo deseo que todo vaya bien.
Tras la intensa conversación que prosiguió, me llevó en un coche con flores en los laterales hacia el juzgado, mi novio nos vio entrar juntos a su padre y a mí. Él estaba con su madre, con una gran sonrisa dibujada en la cara. Mi suegra se acerca y me dice al oído: "Eres el hombre que consigue la felicidad de mi hijo, y es lo único que pretendo, que pase el resto de su vida feliz."

La tua ragazza. La tua scrittrice.

1 comentario:

  1. Desde temprana edad sabía que eras especial. Eres una grandísima lectora, y sobre todo tienes algo muy valioso, que pocas personas poseen, imaginación. Ánimo y no dejes de escribir.

    ResponderEliminar